Luego de mucho trabajo previo ya está disponible el álbum musical denominado Un Puente de Canciones, con letra y música por Chela Painefil y Edgardo Lanfré e interpretadas por la comunidad educativa del jardín de infantes del Colegio Integral Vuriloche.

“Se puede adquirir el material mediante una tarjeta que incluye un código QR y de esa manera descargar las canciones, letras y ficha técnica”, especificó Lanfré en el programa Chocolate por la Noticia, que se emite por El Cordillerano Radio (93.7).

El proyecto del álbum infantil del jardín del colegio, nació a partir de una lectura que hicieron acerca de lo que escuchan y cantan las infancias, teniendo en cuenta un contexto social, donde habitan a diario diferentes espacios.

Claramente el ámbito musical institucional los acerca a vivir experiencias significativas y llenas de valor cultural. Muchas familias aportaronn desde el hogar un ambiente sonoro que acrecentó y enriqueció la propuesta. Sin embargo, otras infancias escuchan música con temática adulta, poco acorde a sus necesidades y su etapa evolutiva.

La intención ha sido trabajar junto con las docentes de cada sala, la clara idea de que lo que cantamos “dice”, “transmite”, “tiene un contenido potente”, además, de que nos da lugar a imaginar, conocer, jugar, sentir.

El proyecto institucional de “Educar para la paz” propone trabajar las emociones, los valores y la resolución pacífica de conflictos.  Así cada docente fue abordando a través de diferentes experiencias, rondas de charlas y conversaciones, actividades que fueron dando como resultado claras ideas y sentires que se fueron transformando en canciones que reflejaron este trabajo.

Chela Paynefil, autora y cantante junto a Edgardo Lanfré, músico, compositor y productor de nuestra ciudad, dieron vuelo a estos sentires y armaron canciones cortas, con rimas pegadizos. Tuvieron en cuenta ritmos alegres que pudieran ensamblar lo expresado: la amistad, la inclusión, los puentes que nos unen, las palabras semillas, la alegría y la magia del llegar al jardín.

Para la concreción de este cancionero y su posterior grabación se contempló un ambicioso entramado donde se encontraron en diferentes espacios con las y los docentes de toda la institución, porteras, personal del comedor, estudiantes, familias, directivos.

La música, el canto, los ritmos y las primeras grabaciones fueron vividas paso a paso para dar origen a un álbum musical cuidado y muy profesional, en el estudio de “Antara producciones”, dirigido por Alejandro Fatur, quien aportó toda su sabiduría técnica para la grabación.